Limpieza y ventilación de las ventanas de PVC

En los post anteriores hemos explicado cuáles son los elementos que deben tener un mantenimiento para la larga duración de nuestras ventanas de PVC.


Una vez que se montan las ventanas de PVC en su hogar, aunque hayan sido colocados con el mayor cuidado posible, pueden ser que hayan sido manchados con marcas de dedos, cementos, pegamentos, cola para tapizar. Las mayoría de estas manchan son fácilmente eliminables utilizando una espátula medio rígida, aplicando presión con mucho cuidado por ambos costados de la mancha repasando con un trapo húmedo.


Al hacerlo procurar que dichos elementos, como los restos de cemento, no produzcan rayaduras sobre la superficie. Un consejo para la eliminación de adhesivos en cristales, es la utilización de una maquinilla de afeitar en posición inclinadas.


Como ya sabréis, las ventanas de PVC son herméticas, tanto en su funcionamiento propio, como en el montaje en la obra, ya que no permiten la renovación involuntaria del are. Un uso correcto de este tipo de ventanas modernas, en cuanto a ventilación se refiere, supone un ahorro considerable de los gastos de climatización, además de lograr un ambiente interior saludable y agradable.


Por ejemplo, el abrir dos ventanas opuestas, genera una ligera corriente de aire, que con apenas 5 minutos, es suficiente para completa renovación del aire. Para obtener un mejor resultado aún, conviene realizar esto unas 3-4 veces al día.


En cuanto a los herrajes, para que puedan conservar su funcionalidad y su capacidad de movimiento, es recomendable realizar un engrase esporádico. Por ejemplo se pueden aplicar aceite lubricante sobre los elementos móviles, o una grasa libre de ácidos o vaselina industrial, en los puntos de cierre.